La sucesión en las empresas, entendida como un proceso que finaliza con la transmisión del poder de decisión y los deberes a un nuevo empleado, ha sido un tema complejo en las compañías.
En este sentido, las vacaciones se presentan la ocasión ideal para preparar a potenciales reemplazantes de cargos importantes, debido a su corta duración, el descenso de las labores, y la baja en la probabilidad de inconvenientes.
La clave para lograr que su viaje sea sinónimo real de descanso, está en aplicar las siguientes claves, que le permitirán dejar en claro al colaborador los circuitos que arman el funcionamiento de su empresa:
No subestimar a los empleados
Lo más seguro es que sus empleados sepan cuáles son sus funciones y no tengan temor de quedarse solos. El mayor problema, generalmente, lo tiene la persona que se va porque pierde el contacto con lo que pasa en la empresa.
Armar funciones concretas de trabajo
Estas, tienen la facultad de garantizar que las cosas ocurrirán de la manera planeada. En este caso, es bueno preguntarse qué deberían hacer los empleados frente a distintas situaciones hipotéticas y dar respuestas concretas al equipo de cuales son las tareas que espera que cada uno desarrolle.
Establecer canales de comunicación claros
Debe elegir quién será el responsable de cada área. Además, se debe seleccionar un responsable operativo y administrativo, con el fin de mantener contacto única y exclusivamente con esa persona a través de reportes.
Crear una cultura del orden
Para que cualquier negocio funcione bien debe estar ordenado, con circuitos de trabajo establecidos, con tareas repartidas y funciones claras.
Fuente altonivel.com.mx
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