Gestión de Empresa Familiar IV: Problemas Humanos

Problemas Humanos
1. Relación de trabajo entre marido y mujer
En la actualidad, hombres y mujeres son, a menudo, partícipes plenos de una misma actividad económica y de un mismo proyecto empresario.
Cuando existe una sociedad empresarial entre marido y mujer, es necesario tener en cuenta que puede existir una diversidad de configuraciones:
1-El marido es un socio activo de la mujer, ocupando incluso cargos directivos
2-La mujer es una socia activa del marido, ocupando incluso cargos directivos
3-Ambos son socios plenos y activos por igual, con la consecuente redistribución de roles en el hogar y la familia.
Asimismo, es preciso tener en cuenta el hecho biológico de que la expectativa de vida de las mujeres supera a la expectativa de vida de los hombres. Este hecho actúa para convertir a la esposa en sucesora natural de la conducción.
Problemas:
•El marido o la mujer no escucha a su cónyuge en temas de la empresa, toma decisiones sin compartir o consultar
•Se originan conflictos por motivos secundarios
•No encuentran tiempo ni oportunidades para conversar de su relación de pareja y familiar
•La esposa se siente excluida de la empresa
Sugerencias:
•Definir claramente, por escrito, tareas y responsabilidades de cada cónyuge.
•Tener objetivos y metas claras a lograr.
•Redacción de normas claras para el poder y las decisiones.
•Establecer anticipadamente el modo de resolver conflictos.
•Separar concretamente los temas laborales de los temas familiares (para que un conflicto laboral no se prolongue a la familia y viceversa).
•Desarrollar alto grado de comunicación.
•Buscar que los talentos individuales sean complementarios y no una competencia.
•Competir con el mundo exterior, no entre sí.
2. Relación de trabajo entre padre e hijo
La raíz de conflictos entre padre e hijo, por lo general, está en la competencia y en la falta de aceptación recíproca. Psicológicamente, no son problemas de ahora. La causa está en la infancia de ambos.
Sugerencias:
•Reconocimiento recíproco de los méritos de cada uno.
•El padre tiene la responsabilidad de reconocer los logros del hijo.
•Otra responsabilidad es no exagerar las diferencias entre distintos hijos.
•El hijo tiene la responsabilidad de reconocer la experiencia y logros del padre.
•Mantener una comunicación siempre abierta entre ambos.
•Participar de seminarios sobre empresas familiares.
•Tener siempre a mano un conciliador para conflictos.
•Saber retirarse en casos de conflictos insolubles.
3. Relación de trabajo entre padre e hija
Las investigaciones científicas muestran que la relación entre padre e hija es mejor que entre padre e hijo. Los padres no suelen ver en la hija una amenaza competitiva. Por otro lado, las hijas se preocupan más por la armonía familiar y evitan conflictos.
Sugerencias:
•Consideramos importante que la hija se capacite antes en otra empresa.
•Evitar establecer áreas de competencia con hijos varones.
•Evitar roles débiles, por ser mujer.